Todos sabemos lo importante que es dormir y descansar bien para poder llevar el día a día. En éste artículo, te explico por qué una Cama Articulada te dará a ti y a los tuyos una mejor calidad de vida
El inicio de una cama hospitalaria o cama eléctrica articulada, fue para dar movilidad a personas enfermas o con impedimentos en la movilidad, pero con el tiempo, su uso se ha generalizado para otros beneficios como puede ser ayudas a la movilidad, dar de comer a enfermos, higiene, salud física y del sueño o incluso para la lectura.
Como los beneficios que aportaban a la salud de los convalecientes y capacidad de maniobra de quienes colaboraban en los tratamientos resultaban notables, las camas de hospital no tardaron en constituir unos recursos exportables a otras instalaciones en las que hubiera internos que las necesitaran.
Ha sido el caso concreto, por ejemplo, de las residencias de personas de la tercera edad, lo que también ha propiciado el surgimiento del concepto camas geriátricas. Se trata de una denominación, grosso modo, homologable a camas de hospital. Con las peculiaridades asociadas a las necesidades del usuario en cuestión, se trata de camas articuladas eléctricas que disponen de las prestaciones explicitadas anteriormente.
Hay personas que reciben tratamientos parecidos a los que se dispensan en los hospitales en su propia casa. Para llevar a cabo determinadas funciones o, simplemente, descansar a gusto, las camas articuladas eléctricas juegan un rol fundamental.
Contar con estos equipamientos implica poder disfrutar de la máxima comodidad y seguridad en casa, lo que tendrá evidentes resultados positivos en materia de salud.
Estas son las 3 ventajas del uso de las camas articuladas para cualquier persona
- Higiene postural correcta para un descanso óptimo
- Reducción de la presión en zonas las principales zonas de dolor
- Mejora de la circulación sanguínea, la respiración y la digestión así como las constantes cardiovasculares